El Ayuntamiento de Salvacañete, en colaboración con la Asociación Interprofesional de Truficultura y Actividades Turísticas Relacionadas de Salvacañete, ha iniciado los trabajos de preparación del futuro campo de ensayo y experimentación de trufa negra, tuber melanosporum, en Salvacañete.
Los terrenos están situados en las proximidades del casco urbano consolidado, junto al arroyo del Nacimiento.
Ya se ha solicitado un estudio de suelo ampliado al Instituto Técnico Agronómico Provincial de Albacete (I.T.A.P.), dependiente de la Diputación Provincial de Albacete, del que se tendrán los resultados la próxima semana; así como, un informe-certificado de las plantas seleccionadas al Centro Nacional de Recursos Genéticos Forestales “El Serranillo” en Guadalajara, dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Se ha optado por utilizar plantas de una savia y de dos savias y de diferentes especies: avellano, encina y quejigo. De esta forma se podrán observar y estudiar la adaptación al medio, el crecimiento o la productividad de los distintos tipos.
La apuesta por el cultivo de la trufa negra en la Serranía de Cuenca, como motor de desarrollo económico y social de la comarca, ha sido un objetivo claro tanto del ayuntamiento como de la asociación.
Se trata de un cultivo sostenible y ecológico, con fuertes raíces familiares en Salvacañete, donde varias familias han sabido reconocer su valor y poder vivir de este recurso, tal y como ha declarado Vicente Giménez, alcalde de Salvacañete.
La organización del I Foro de Truficultura y Encuentro1. Trufa GastroCultura han conseguido relanzar el cultivo y el consumo de la trufa negra y han puesto de manifiesto la imprescindible colaboración de diferentes sectores: agrícola-forestal, gastronómico y académico, como ha reconocido José Alberto García, presidente de la asociación.